Once municipios de la Comunidad de Madrid han dado un paso adelante en la búsqueda de soluciones al creciente problema del acceso a la vivienda al aprobar un texto conjunto destinado a modificar la Ley de Suelo de la región. Esta iniciativa permite que las ciudades puedan autodeclararse como «zonas de mercado residencial tensionado», lo que abriría la puerta a medidas concretas para regular el mercado inmobiliario.
La propuesta fue acordada por la Comisión de Alcaldes y Alcaldesas, una entidad formada la pasada semana, e incluye la participación de municipios como Getafe, Fuenlabrada y Alcorcón, además de la reciente adhesión de Pinilla del Valle y San Martín de la Vega. La alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, ha sido una de las voces más críticas con la actual gestión de la vivienda en la comunidad, subrayando la falta de iniciativa de la presidenta Isabel Díaz Ayuso frente a la especulación inmobiliaria.
El texto de la iniciativa será sometido a votación en cada pleno municipal a lo largo de noviembre, con la intención de elevar la propuesta a la Mesa de la Asamblea de Madrid en diciembre. Los representantes locales resaltan la urgencia de actuar en un mercado que sigue estrangulando el acceso a la vivienda. Según Hernández, el foco del gobierno regional está más en los intereses de los especuladores que en los ciudadanos.
Los alcaldes implicados esperan que esta medida, respaldada por municipios que abarcan cerca de 900,000 residentes, genere un debate en la Asamblea, apuntando a una colaboración más efectiva entre administraciones para avanzar en el derecho a la vivienda.
Hasta la fecha, el Gobierno de la Comunidad de Madrid ha mostrado resistencia a declarar zonas tensionadas, en contraste con lo previsto en la Ley estatal de vivienda. Sin embargo, el bloque de municipios empuja por una reevaluación de esta postura, buscando herramientas legales que permitan regular los precios y proteger a los residentes.
