La creciente inseguridad en la Casa de Campo ha generado preocupación entre los vecinos, quienes han solicitado medidas más estrictas para garantizar su seguridad. En respuesta a estas inquietudes, las autoridades locales han decidido intensificar la presencia policial en la zona, con el objetivo de disuadir actividades delictivas y ofrecer mayor tranquilidad a los residentes y visitantes. Este espacio, considerado uno de los pulmones verdes más importantes de la ciudad, ha sido escenario de diversos incidentes que han disparado las alertas y han llevado a los ciudadanos a exigir una rápida actuación.
La respuesta de las autoridades ha sido clara: se implementará un plan de vigilancia reforzado que incluye patrullajes constantes y el uso de tecnología para prevenir delitos. La presencia policial se hará visible con el despliegue de efectivos adicionales y la instalación de cámaras de seguridad en puntos estratégicos. Estas medidas buscan no solo reducir el índice de criminalidad, sino también devolver a los ciudadanos la confianza para disfrutar de la Casa de Campo sin temores. La colaboración de la comunidad es también fundamental, y las autoridades han hecho un llamado a los vecinos para que reporten cualquier actividad sospechosa.
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