Este viernes, Borja Carabante, delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, supervisó los progresos en el soterramiento de la A-5. En el acceso que une la carretera de Boadilla con el paseo de Extremadura, comunicó las próximas afectaciones al tránsito peatonal y vehicular, mientras trabajadores retiraban el sistema de radar de tramo, operativo desde abril de 2019.
Junto a Alberto González, concejal del distrito de Latina, y técnicos municipales, Carabante anunció que seis pasos peatonales inferiores serán eliminados gradualmente. El primer cierre ocurrirá el 3 de febrero de 2025, cuando se clausurará el pasadizo entre las calles San León y Sanchorreja, ofreciendo como alternativa el paso del enlace de Yébenes.
En los días 9 y 10 de febrero se eliminará otro paso en el enlace de Boadilla, sugiriendo como alternativas la pasarela del Anillo Verde Ciclista o el paso inferior en la avenida del Padre Piquer. Asimismo, los pasos de San Juan de la Mata, Villamanín, y Olivillo serán reemplazados por alternativas en Yébenes, Batán, y Dante. Por último, el 20 de febrero, el paso de Villavaliente será sustituido por el enlace de Batán, y el 10 de marzo el de Illescas dará lugar a opciones en la avenida del Padre Piquer y la pasarela ciclista.
Estas obras también afectarán al estacionamiento en algunas áreas. Notablemente, la noche del 9 al 10 de febrero se cerrará la calzada sur de la A-5, desviando el tráfico a la calzada norte y reduciéndose a cuatro carriles totales. La velocidad permitida se ha ajustado de 70 a 50 km/h.
Con esta transformación urbana, el Ayuntamiento de Madrid espera unir comunidades vecinas previamente separadas por la autovía, como Lucero, Aluche, y Las Águilas con Campamento y Casa de Campo. La intervención reducirá un 90 % del tráfico y las emisiones en superficie, liberando el bulevar peatonalizado desde la avenida de Portugal hasta la avenida del Padre Piquer, sobre 3,2 kilómetros. Se priorizará la movilidad peatonal y ciclista, preservando recorridos locales para vehículos y transporte público.
El nuevo túnel subterráneo incluirá tres carriles por sentido, con los más interiores reservados para transporte público y uso variable según la demanda. Este sistema flexible optimizará la infraestructura, ajustándose a las necesidades del tráfico. Los ciudadanos pueden consultar detalles del proyecto y rutas alternativas en la página web del Ayuntamiento.