La reciente divulgación de un diagrama detallado del chip GB202, núcleo de la nueva tarjeta gráfica RTX 5090 de Nvidia, ha captado la atención en el mundo de la tecnología. Este componente clave, parte de la prometedora arquitectura Blackwell, refleja las aspiraciones de Nvidia en consolidar su supremacía en el mercado de las GPU de alto rendimiento.
El chip GB202, que es un 24% más grande que su predecesor AD102 de la serie RTX 4090, suma una extensión de 761,56 mm² en comparación con los 616 mm² del modelo anterior. Este incremento permite a Nvidia ofrecer no solo una mayor potencia de procesamiento sino también expandir sus capacidades gráficas. Este crecimiento físico es evidente en su diseño interior, donde la caché L2, corazón del chip, está organizada en capas de 32 MB fragmentadas en bloques de 2 MB. Esta disposición aumenta la eficiencia, crucial en tareas que demandan alto rendimiento gráfico y gestión de memoria intensiva.
Alrededor de la caché L2, se encuentran distribuidos 12 grupos de procesamiento gráfico (GPC), que a su vez contienen clusters de procesamiento de texturas (TPC). En total, el GB202 posee 96 TPC, cada uno integrado por multiprocesadores de streaming (SM), que alojan núcleos CUDA y caché L1, aspectos fundamentales para su potente desempeño.
El robusto esquema del GB202 se completa con 12 bloques de motores de rasterización/3D FF, componentes esenciales para el procesamiento geométrico en imágenes visibles, un requisito para la producción de gráficos de alta calidad. Además, la estructura de memoria del chip no se queda atrás, al incorporar ocho controladores de memoria de 64 bits dispuestos alrededor de la caché L2, complementados con las interfaces físicas de GDDR7 de 32 bits en tres de sus perimetros, asegurando un rendimiento óptimo incluso en las tareas más exigentes.
En el centro del chip, extendiéndose de arriba a abajo, se han integrado codificadores y decodificadores de video, NVDEC y NVENC, que ofrecen capacidades avanzadas para la reproducción y grabación de video. Esta característica, junto a su interfaz PCIe 5.0 x16 y un controlador de pantalla avanzados, consolidan a la RTX 5090 como una opción ineludible para creadores de contenido y usuarios de alto rendimiento.
El proceso de fabricación del GB202, bajo el nodo N4P de TSMC, representa una evolución del proceso N4 utilizado en chips Ada Lovelace. Esta actualización permite no solo un incremento en el tamaño del chip sino también avances significativos en eficiencia y rendimiento. Sin embargo, a pesar de sus impresionantes dimensiones, el GB202 no supera a los chips de las arquitecturas Hopper y Volta, quienes permanecen como los más grandes de Nvidia hasta la fecha.
En definitiva, el GB202 se presenta como un hito en la evolución de las GPU, no solo por su tamaño, sino por su diseño optimizado y capacidad de procesamiento formidable. Con su arquitectura Blackwell, Nvidia sigue redefiniendo los límites de las tarjetas gráficas de alta gama, manteniéndose a la vanguardia en un mercado ferozmente competitivo. Para entusiastas, desarrolladores y profesionales, la RTX 5090 promete ser una herramienta revolucionaria, capaz de establecer nuevos estándares de potencia gráfica y abrir horizontes en creación de contenido, videojuegos y aplicaciones de cálculo intenso.