En un giro inesperado dentro del escenario tecnológico global, NVIDIA ha anunciado que retomará las ventas de su GPU H20 en China, después de un proceso de negociaciones con el Gobierno de Estados Unidos. La reanudación se produce tras una reunión clave entre el CEO de la empresa, Jensen Huang, y el expresidente Donald Trump en la Casa Blanca.
La compañía ha avanzado que ya ha presentado la solicitud necesaria para volver a comercializar su GPU H20 en China, la cual está diseñada para ajustarse a las restricciones de exportación impuestas por EE.UU. Han recibido garantías de que la autorización llegará pronto, lo que les permitirá retomar los envíos de forma inminente.
Este movimiento representa un alivio significativo para NVIDIA, que había registrado provisiones de 5.500 millones de dólares debido a bloqueos en el envío del procesador a China. La ausencia del mercado chino había obligado a la empresa a tratar cualquier ingreso residual como ganancias extraordinarias, alejándolo de sus previsiones regulares.
Junto con esta noticia, Huang presentó la nueva GPU RTX PRO, concebida específicamente para el mercado chino. Este nuevo producto está diseñado para cumplir con las normativas actuales y es ideal para aplicaciones de inteligencia artificial en fábricas inteligentes y logística. Esta iniciativa subraya el deseo de NVIDIA de seguir vigente en China pese a las crecientes restricciones.
En sus declaraciones en Washington D.C., Huang destacó la importancia de mantener el liderazgo tecnológico de EE.UU. en inteligencia artificial. Según el ejecutivo, los modelos civiles deben operar sobre la infraestructura tecnológica estadounidense, incentivando así a otras naciones a elegir a América como su aliado tecnológico.
El escenario global ve a NVIDIA expandiéndose con firmeza, respaldada por un informe de UBS que anticipa ingresos de 1,5 billones de dólares en el futuro derivados de centros de datos. La compañía ya ha identificado numerosos proyectos de infraestructura de inteligencia artificial, reafirmando su posición de liderazgo.
Este permiso para operar nuevamente en China no solo es una victoria para NVIDIA, sino también un momento crucial en las relaciones geopolíticas entre EE.UU. y China. El regreso de los chips H20 podría aliviar momentáneamente las tensiones, abriendo un nuevo capítulo en la batalla tecnológica entre ambas potencias.
Finalmente, la decisión de EE.UU. concede a NVIDIA una valiosa segunda oportunidad para maximizar su estrategia de mercado mediante el diseño de chips adaptados a normativas específicas, manteniendo su hegemonía en una industria altamente competitiva y estratégica.
Más información y referencias en Noticias Cloud.