El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, ha anunciado hoy una serie de ambiciosas iniciativas destinadas a mejorar la accesibilidad y modernización del Metro de Madrid. Durante una visita a las obras de la estación de Ventas, que sirve a las líneas 2 y 5, el consejero detalló la instalación de nuevos ascensores en diversas estaciones y otras medidas pensadas para facilitar el acceso a los usuarios. La estación de Ventas, utilizada mensualmente por aproximadamente 250,000 viajeros, será objeto de una modernización integral.
Rodrigo destacó que en las estaciones de Tetuán, Puente de Vallecas, Campamento, Canillejas, Ciudad Lineal y Carabanchel se instalarán elevadores directos desde la calle hasta los andenes, obviando el vestíbulo. Esta decisión responde a la necesidad de optimizar los espacios unilínea, reduciendo costos y plazos al tiempo que proporciona un acceso más rápido a los usuarios. La instalación de tornos en la galería que conecta el ascensor con el andén permitirá la validación de los títulos de transporte. En el plazo de un año, se prevé la apertura de dos ascensores adicionales en cada ubicación, a excepción de Ciudad Lineal, que tendrá tres, y Carabanchel, que sumará cuatro debido a su cercanía con el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla.
En paralelo a estos esfuerzos, el consejero anticipó el inicio, en marzo, del montaje de escaleras mecánicas en las estaciones de Prosperidad, Estrella y San Blas. Este proyecto cuenta con una inversión de más de 3,5 millones de euros y forma parte del compromiso continuado del gobierno regional por mejorar la accesibilidad del transporte subterráneo.
La transformación de la estación de Ventas incluye la incorporación de cinco nuevos elevadores, así como la renovación de pasillos, entradas y un vestíbulo totalmente remodelado. Esta obra, que comenzó en verano con un presupuesto superior a los 14 millones de euros, se estima que concluirá en el primer trimestre de 2026. Las actuaciones también comprenden la actualización de revestimientos, instalaciones y tecnología, con miras a facilitar el mantenimiento y mejorar la funcionalidad de la estación.
Una iniciativa de particular interés es la rehabilitación de un vestíbulo antiguo en la estación de Ventas, cerrado al público desde 1970. Este espacio será restaurado y, una vez completado, se integrará en el circuito de los Museos de Metro, brindando a los usuarios la oportunidad de redescubrir una parte de la historia del suburbano madrileño.
Cabe destacar que Metro de Madrid posee una certificación AENOR, testimonio de su compromiso con la accesibilidad. Con 1.710 escaleras mecánicas y 559 ascensores, el Metro de Madrid se posiciona como el más accesible de Europa y el cuarto a nivel mundial en este ámbito.
