La ampliación y modernización de infraestructuras hidráulicas sigue avanzando en la Comunidad de Madrid con el ambicioso proyecto liderado por Canal de Isabel II, que prevé transformar el paisaje del saneamiento en el corredor de la autovía A-1. Este proyecto, que culminará en la segunda mitad de 2027, consiste en la construcción de un colector de casi 4 kilómetros, destinado a mejorar la gestión de las aguas residuales en la región.
El nuevo colector, que atraviesa principalmente en paralelo a la A-1, se dividirá en cuatro segmentos y contará con 83 pozos de registro. Su diseño combina tramos de conducción de PVC-U de 800 milímetros de diámetro con galerías profundas, e incluye un pequeño cruce bajo el arroyo Peralejo. Se prevé que esta infraestructura facilite la conexión del núcleo residencial con el sistema de saneamiento de Canal de Isabel II, dirigiendo los residuos líquidos hacia la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) Arroyo Quiñones, la cual ha recibido recientemente importantes mejoras.
Esta iniciativa es parte de un convenio de colaboración firmado en 2024 que involucra al Ejecutivo autonómico y los ayuntamientos de San Sebastián de los Reyes, Colmenar Viejo y Alcobendas. Este pacto contempla inversiones en infraestructuras hidráulicas por un total de 86 millones de euros, abarcando además las renovaciones en las depuradoras Arroyo Quiñones y Arroyo de la Vega.
La empresa pública Canal de Isabel II está comprometida con la mejora de las infraestructuras de alcantarillado y depuración en toda la región. Actualmente, gestiona cerca de 16.000 kilómetros de colectores y redes de alcantarillado, junto con 155 estaciones de depuración de aguas residuales. Para la compañía, la misión es clara: asegurar el mantenimiento y la modernización continua para cumplir con las normativas vigentes, adaptándose a las exigencias actuales y futuras.
El Plan Estratégico 2025-2030 de Canal de Isabel II prevé una inversión de 800 millones de euros destinada a la modernización de estas infraestructuras esenciales. Este plan no solo busca mejorar los sistemas de drenaje y depuración, sino también adoptar nuevas tecnologías que permitan cumplir con las normativas de vertido, garantizar la sostenibilidad ambiental y mitigar los efectos de los eventos climáticos extremos.
Con estas acciones, Canal de Isabel II continúa consolidando su papel como referente en la gestión sostenible del agua, apostando por infraestructuras innovadoras y resilientes que beneficien a las comunidades y protejan el medio ambiente en la Comunidad de Madrid.