La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha dado luz verde hoy al Plan de actuación ante episodios de altas temperaturas extraordinarias (CALORMAD), un innovador esfuerzo para gestionar emergencias causadas por olas de calor en la ciudad. Este nuevo plan, una pieza fundamental del Plan Territorial de Emergencia Municipal de Madrid (PEMAM), actualiza y reemplaza el protocolo operativo de actuación aprobado en abril de 2023. Con ello, Madrid refuerza su estrategia de adaptación al cambio climático y su capacidad para responder a situaciones extremas provocadas por altas temperaturas.
Durante una rueda de prensa, la vicealcaldesa de Madrid y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, explicó que la conversión del anterior protocolo en un plan de emergencias "no sólo le dota de mayor consistencia y solidez, sino que también lo sitúa en total consonancia con los planes de emergencia de la Comunidad de Madrid". Además, mencionó que CALORMAD ya ha sido aprobado por la Comisión regional de Protección Civil, lo que garantiza su reconocimiento a nivel interadministrativo.
El objetivo primordial de CALORMAD es proteger a la población y mitigar los impactos de las temperaturas extremas. Para ello, se ha estructurado una organización funcional que optimiza los recursos humanos y materiales del municipio. Este esfuerzo incluye una coordinación estrecha y una comunicación constante entre los diferentes servicios y áreas del Ayuntamiento.
Entre las medidas que contempla CALORMAD se encuentran:
- Mecanismos de vigilancia y evaluación de la situación y su impacto en la ciudad.
- Procedimientos para informar y alertar a la población ante riesgos por olas de calor.
- Medidas de mitigación y protección, especialmente enfocadas en personas vulnerables.
- Estrategias para la correcta implementación y eficacia continua del plan.
- Medidas preventivas anticipadas.
El plan se activa en función de las previsiones y avisos de Salud Pública, y contempla dos fases operativas según la evolución de la emergencia. La Fase de Alerta y Seguimiento se activa al alcanzar el nivel amarillo de riesgo, momento en el cual se mantiene una vigilancia constante, con especial atención a los colectivos vulnerables. Esta fase corresponde al nivel 0 del plan.
En caso de agravarse la situación, se activa la Fase de Emergencia, que inicia al alcanzar el nivel rojo de riesgo y contempla tres niveles de actuación:
- Nivel 1: La emergencia puede ser gestionada con los recursos del Ayuntamiento de Madrid, con posibles colaboraciones puntuales de otras administraciones.
- Nivel 2: La emergencia requiere la integración del plan municipal en el Plan Territorial de Protección Civil de la Comunidad de Madrid (PLATERCAM), bajo su dirección.
- Nivel 3: Se declara la Emergencia de Interés Nacional, con el despliegue de todos los recursos del Sistema Nacional de Protección Civil y bajo la dirección del Ministerio del Interior.
Este avance refuerza la capacidad de Madrid para enfrentar las emergencias climáticas, garantizando una respuesta más eficaz y coordinada ante episodios de altas temperaturas. La entrada en vigor del CALORMAD marca un hito en la protección de los ciudadanos y el medio ambiente frente a los retos del cambio climático.