Ocho menores han presentado denuncias por agresión sexual contra el sacerdote Marcelino, quien hasta hace poco ejercía en una parroquia de Madrid. Según las declaraciones, los abusos habrían ocurrido durante actividades organizadas por la iglesia y en encuentros particulares. Las denuncias fueron presentadas a la policía tras el creciente número de testimonios por parte de las víctimas. Las autoridades eclesiásticas han iniciado una investigación interna, mientras que el sacerdote ha sido apartado de sus funciones hasta que se esclarezcan los hechos.
El caso ha despertado una profunda indignación en la comunidad local y ha provocado un debate sobre la seguridad de los menores en instituciones religiosas. Las familias de las víctimas han manifestado su deseo de que se haga justicia y se implementen medidas preventivas para evitar futuros incidentes. Organizaciones de defensa de los derechos de los niños han exigido mayor transparencia y celeridad en el proceso judicial, al tiempo que han ofrecido apoyo psicológico a las víctimas. La investigación sigue en curso y se espera que haya más declaraciones en los próximos días.
Leer noticia completa en El Mundo.