A medida que estos productos ganan popularidad, especialmente entre los jóvenes, se alerta sobre los peligros que representan y la necesidad de una regulación más estricta. Organizaciones de salud y expertos en el tema insisten en que es crucial establecer normativas más rigurosas para controlar su uso, ya que los riesgos asociados podrían tener consecuencias graves a largo plazo.
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