El Ejército de Israel ha llevado a cabo numerosos ataques en el sur del Líbano después de interceptar tres cohetes disparados desde Khiam hacia Metula, marcando el primer incidente de este tipo desde diciembre. Los ataques israelíes, que han tenido como objetivo posiciones de Hezbolá, han resultado en la muerte de al menos nueve personas, incluyendo cuatro en la localidad de Toulin, según el Ministerio de Salud libanés. Además, se han registrado al menos once heridos, incluidos dos niños. No hay informes de víctimas en Israel, y el ejército libanés ha asegurado estar trabajando para desmantelar las lanzaderas de cohetes y mantener la estabilidad en la frontera.
En paralelo, la situación en la Franja de Gaza también se ha deteriorado, con al menos 14 muertes reportadas por ataques israelíes, según Hamás. Los incidentes, que incluyen un bombardeo en un edificio residencial en el barrio de Al Tufá en la ciudad de Gaza y ataques en otras localidades, han dejado varios heridos y provocan más tensiones en la región. Mientras tanto, en Israel, los familiares de rehenes israelíes secuestrados por Hamás en Gaza han criticado duramente al primer ministro Benjamin Netanyahu, acusándolo de destruir las posibilidades de un acuerdo de alto el fuego que facilitaría el intercambio de rehenes por presos. Las tensiones y los enfrentamientos en ambas fronteras siguen aumentando las preocupaciones sobre un posible escalamiento del conflicto.
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