La ropa diseñada por esta icónica marca, que inicialmente apuntaba a los entusiastas del esquí, no solo se consolidó en las estaciones invernales sino que, en décadas recientes, también se hizo un lugar en las discotecas, convirtiéndose en un símbolo de estatus social. Durante esta evolución, su creador no solo fungía como diseñador, sino que se convirtió en una figura influyente que guiaba las tendencias y defendía la calidad y exclusividad en cada prenda, capturando la atención de generaciones enteras que buscaban distinguirse y sobresalir.
En años recientes, el fundador de esta emblemática firma volvió a tomar las riendas, asesorando el resurgimiento de la empresa que inauguró en los años 60. Este retorno estaba impulsado por el deseo de reinterpretar las raíces de la marca mientras incorporaba innovaciones y nuevos estilos acordes a las exigencias contemporáneas del mercado. Así, se aseguraba de mantener el legado intacto para las nuevas generaciones, consolidando su posición tanto en el panorama de la moda como en el consciente colectivo de la sociedad.
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