En la apertura del año legislativo en Marruecos, el rey Mohamed VI centró su discurso en el contencioso del Sáhara Occidental, subrayando la importancia de resolver la disputa histórica con el Frente Polisario. Destacó la necesidad de consolidar la posición de Marruecos y urgió a los parlamentarios a mantener la vigilancia y movilización. El contexto del discurso estuvo marcado por una reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que consideró como territorios separados a Marruecos y el Sáhara Occidental, impactando los acuerdos agrícolas y pesqueros con la UE. Mohamed VI expresó su agradecimiento a varios países, en particular a España, por apoyar la iniciativa de autonomía bajo soberanía marroquí, considerada por el monarca como la única solución viable para el conflicto.
Asimismo, el rey alauí extendió su agradecimiento a Francia, citando el respaldo del presidente Emmanuel Macron a la afirmación de la marroquinidad del Sáhara. Mohamed VI elogió la evolución positiva hacia el reconocimiento del estado de Derecho y los derechos históricos de Marruecos, enfatizando el rol de Francia como un influyente miembro del Consejo de Seguridad de la ONU. Subrayó la importancia de mantener la firmeza en su postura, mientras promueve el desarrollo regional. A pesar de las recientes resoluciones judiciales europeas, el rey reiteró el compromiso de su país con la soberanía sobre el Sáhara, presentándolo como un asunto prioritario para todos los ciudadanos marroquíes.
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