En un emotivo acto celebrado en el Parque del Retiro de Madrid, familiares y amigos de José Luis Alcazo conmemoraron su memoria, 45 años después de su trágica muerte a manos de un grupo de adolescentes de ultraderecha. Alcazo, quien no tenía afiliaciones políticas conocidas y simplemente vestía según las tendencias de su tiempo, fue brutalmente asesinado en 1979, en un suceso que aún resuena en la memoria colectiva como símbolo de la violencia ideológica de finales del siglo XX en España. Durante el homenaje, su sobrino compartió recuerdos íntimos y describió a Alcazo como un joven comprometido con su vida y sus pasiones, alejado de cualquier activismo político, pero víctima del odio desmedido que caracterizó aquella época convulsa.
El evento en Retiro no solo sirvió para honrar la vida de Alcazo, sino también para reflexionar sobre las consecuencias de la intolerancia y el fanatismo. Desde el escenario, diversos oradores subrayaron la importancia de recordar estas historias personales para evitar la repetición de errores pasados y abogar por una sociedad más inclusiva y respetuosa. El homenaje cerró con un minuto de silencio, marcando un momento de recogimiento y memoria colectiva, mientras los asistentes mantenían viva la memoria de Alcazo y reafirmaban su compromiso con los valores democráticos y de convivencia pacífica.
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