El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha arremetido contra el Gobierno de Pedro Sánchez por lo que describe como una «inexplicable inacción» durante el tiempo crítico posterior al riesgo de rotura de la presa de Forata. Mazón sostiene que el Ministerio de Transición Ecológica estaba al tanto del peligro desde las 17:30 horas, pero no activó los protocolos ni alertó a la población hasta las 20:00 horas, después de que Hugo Morán, Secretario de Estado de Medio Ambiente, se comunicara con Salomé Pradas, consellera de Interior. El episodio, que habría amenazado la seguridad de 80.000 personas, ha generado tensiones entre la Generalitat Valenciana y el Gobierno central. Según Mazón, la espera para que él llegara al Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) como justificación es inaceptable, ya que no era necesaria su presencia para tomar decisiones ejecutivas.
La controversia se intensifica al admitir que el Gobierno central tenía la capacidad de intervenir de inmediato a través de su representación en el CECOPI, lo que coloca bajo escrutinio al Ministerio de Transición Ecológica. Mazón ha exigido explicaciones y una investigación exhaustiva sobre las decisiones tomadas durante esas horas críticas. Este enfrentamiento se inscribe en un contexto ya tenso por la coordinación durante la DANA que afectó a la Comunidad Valenciana y amenaza con complicar la gestión de ayudas y la reconstrucción de las áreas afectadas. En respuesta, la oposición en las Cortes Valencianas ha solicitado comparecencias de los responsables de emergencias para esclarecer la cronología y las razones del retraso en la activación de medidas de seguridad.
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