El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, del Partido Popular, se ha enfrentado a críticas tras sus recientes declaraciones sobre su actuación durante la devastadora DANA que azotó la provincia de Valencia a finales de octubre, causando 218 muertes. En una intervención previa a la reunión del Cecopi, Mazón desmintió haber estado incomunicado durante cinco horas, contradiciendo afirmaciones que, según él, provinieron del alcalde de Cullera. Mazón sostuvo que estuvo en contacto constante, incluso refutando un relato del alcalde de Cullera, quien, a su juicio, indicó lo contrario. Sin embargo, el alcalde ha negado tales acusaciones, asegurando que nunca afirmó que Mazón estuviera incomunicado, sino que simplemente «no estaba donde debía estar».
Jordi Mayor, alcalde de Cullera y miembro del PSPV-PSOE, respondió rápidamente a las declaraciones de Mazón, aclarando el contexto de la comunicación que mantuvieron el 29 de octubre. Según Mayor, recibió una llamada a través de WhatsApp de un número desconocido que, al contestar, resultó ser del presidente Mazón, algo que le sorprendió debido a la tensión del momento, dado que el pueblo estaba en alerta roja por posibles desbordamientos del río Júcar. En su relato, Mayor también mencionó que el Cecopi había citado a una reunión a causa del riesgo implícito en la presa de Forata, sugiriendo que la situación era crítica, aunque dicha convocatoria nunca se materializó. El alcalde creía que Mazón llamaba desde el Cecopi, evaluando la situación con los diferentes alcaldes afectados, mientras él se mantenía atento a posibles emergencias en su localidad.
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