El ex presidente de la Generalitat ha manifestado su profunda preocupación por el daño sufrido en la «credibilidad de las instituciones» y ha subrayado la necesidad urgente de implementar cambios significativos. Durante una conferencia reciente, destacó que la erosión de confianza en los organismos gubernamentales no solo afecta la percepción pública, sino que también compromete la eficacia del gobierno. El ex mandatario insistió en la importancia de restaurar el «sustento moral» que, a su juicio, es fundamental para que una administración pueda embarcarse exitosamente en el arduo proceso de reconstrucción que se avecina.
En sus declaraciones, señaló que para alcanzar estos objetivos es imperativo establecer un diálogo constructivo entre todas las fuerzas políticas y sociales implicadas. Resaltó que la reconstrucción no es solo una tarea de infraestructura, sino también de recuperación de la confianza ciudadana y el fortalecimiento del tejido social. Además, hizo un llamado a los actuales líderes para que prioricen esta agenda, sugiriendo que solo así se logrará un verdadero progreso que trascienda intereses partidistas y se enfoque en el bienestar común. Su alocución concluyó instando a un compromiso renovado con los principios de transparencia, ética y responsabilidad dentro de todas las esferas del gobierno.
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