En España, las pequeñas y medianas empresas (pymes) están colocando la sostenibilidad en el centro de sus estrategias operativas y financieras, según el informe «Perspectiva empresarial de las pymes en España 2025», elaborado por Acquis. Destaca que un 61% de estas empresas considera esencial que las compañías de leasing propongan alternativas de financiación verde al alquilar equipos.
La sostenibilidad ha dejado de ser un mero añadido para convertirse en un requisito esencial. Este enfoque no solo permite a las pymes cumplir con regulaciones actuales, sino también mejorar su competitividad, eficiencia y permanencia en el mercado. El 40% de las pymes está ya aplicando criterios ASG (ambientales, sociales y de gobernanza), según un estudio de la Cámara de Comercio de España.
El Eurobarómetro de la Pyme 2024 también refleja que un 35% de las pymes españolas ya comercializa productos y servicios sostenibles, impulsadas por una demanda creciente de un mercado cada vez más consciente de su impacto ambiental, social y económico.
Acquis resalta que el 63% de estas empresas trabaja con intermediarios financieros, buscando arrendadores que ofrezcan incentivos de financiación verde. Luis Targhetta, responsable de Desarrollo Comercial de Iberia e Italia para Acquis, afirmó que las pymes necesitan herramientas financieras alineadas con sus compromisos de sostenibilidad. Señaló que los arrendadores tienen una oportunidad para convertirse en socios estratégicos, apoyando la transición ecológica sin comprometer la competitividad de las empresas.
Existen diferencias regionales en cuanto al interés por la financiación sostenible. Las pymes en Galicia, Cataluña, País Vasco, Madrid y Aragón son las más activas dentro del leasing verde. Esto revela que la sostenibilidad atraviesa sectores y tamaños, generando una transformación cultural en todo el ecosistema empresarial.
El informe concluye que los arrendadores y entidades financieras que incorporen soluciones verdes estarán en mejor posición para satisfacer la creciente demanda. En un entorno donde la financiación sostenible es cada vez más crucial, esta adaptación no solo ofrece ventajas competitivas, sino que es una necesidad clave para el futuro financiero.