Ceuta enfrenta una situación de presión migratoria extrema con aproximadamente 500 intentos de entrada diaria desde Marruecos y Argelia, alcanzando un pico de 1.500 personas en un solo día reciente. Las instalaciones del CETI albergan a 800 residentes, superando su capacidad de 512. La Delegación del Gobierno trabaja con el Ministerio de Juventud e Infancia para habilitar nuevos espacios de acogida para menores y devuelve entre 150 y 200 personas diariamente a Marruecos. La delegada Cristina Pérez ha destacado el esfuerzo de la Guardia Civil, Policía Nacional y autoridades marroquíes en el control migratorio y ha agradecido su colaboración esencial para gestionar la crisis.
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