Al menos 58 personas han sido detenidas en Francia durante la huelga general convocada por los sindicatos para protestar contra el ajuste presupuestario propuesto por el anterior Gobierno. Este jueves por la mañana, se registraron arrestos en diversas ciudades, como Marsella, donde se llevaron a cabo 22 detenciones en el barrio de Joliette, y en Toulouse, donde varias personas intentaron bloquear las vías del tren. Los arrestos también se extendieron a París, donde estudiantes del liceo Maurice Ravel bloquearon el acceso al centro educativo. La Prefectura local indicó que este clima de tensión se anticipó, con el ministro del Interior, Bruno Retailleau, movilizando a 80,000 policías para mantener el orden.
La líder de la Confederación General del Trabajo (CGT), Sophie Binet, ha instado a una amplia participación en más de 260 marchas a nivel nacional, subrayando que «nunca han estado tan en situación de fuerza». Binet destacó la vulnerabilidad del nuevo primer ministro, Sébastien Lecornu, y la necesidad de presionar para que se retire el controvertido proyecto de presupuestos, que incluye recortes significativos como la congelación de prestaciones sociales y la supresión de días festivos. El plan de ajuste busca reducir el déficit, que este año se proyecta en el 5,4% del PIB, un contexto que los sindicatos consideran insostenible sin medidas de justicia social.
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