En Mont-roig del Camp, Tarragona, unas 3,000 personas se congregaron el sábado para protestar contra la instalación de una planta de Lotte Energy Materials. La manifestación fue organizada por colectivos como Revoltes de la Terra, Salvem Montroig, Unió de Pagesos y Revolta Pagesa, quienes plantaron árboles en el área prevista para la fábrica química. La protesta incluyó una marcha lenta con una columna de tractores y participantes a pie y en bicicleta, destacando la importancia de preservar la tierra destinada al cultivo frente a la expansión industrial.
Marta Roig, portavoz de Revoltes de la Terra, enfatizó la alianza clave entre campesinos, ecologistas y luchadores sociales para defender el territorio. Ton Crusells, de Unió de Pagesos, criticó que el desarrollo de Tarragona depende excesivamente de la industria, poniendo en peligro la tierra agrícola. Ramon Rojo, de Revolta Pagesa, participó en la marcha con el argumento de que la fábrica afectaría negativamente el precio del suelo agrario. Estas protestas subrayan la tensión entre desarrollo industrial y sostenibilidad ambiental en la región.
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