El Ministerio del Interior, dirigido por Fernando Grande-Marlaska, enfrentó nuevamente la polémica al vetar sorpresivamente al coronel Diego Pérez de los Cobos durante la celebración de la festividad de la patrona de la Guardia Civil en Madrid. El coronel debía realizar la tradicional entrega de mando a su sucesor, en lo que sería uno de sus últimos actos oficiales antes de su jubilación en dos meses. Sin embargo, la ceremonia fue cancelada abruptamente la noche anterior, bajo el pretexto de previsiones meteorológicas adversas que nunca se materializaron. El hecho de que el resto de actividades se celebraran sin inconvenientes ha generado sospechas sobre las verdaderas intenciones del ministerio, especialmente considerando la tumultuosa relación entre Pérez de los Cobos y Grande-Marlaska.
Este incidente no es un hecho aislado, sino parte de una prolongada disputa entre Pérez de los Cobos y el Ministerio del Interior que se remonta al 2020. La controversia comenzó cuando Marlaska destituyó al coronel por su negativa a proporcionar información confidencial sobre la investigación de la manifestación del 8-M durante la pandemia, una decisión que el Tribunal Supremo posteriormente revocó, ordenando su restitución. A pesar del respaldo judicial, el ministerio ha impedido sistemáticamente el ascenso del coronel a general, intensificando así el conflicto. La situación ha provocado fricciones internas y solidaridad entre los altos mandos de la Guardia Civil, quienes también optaron por no asistir al acto en muestra de apoyo a De los Cobos.
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