El Hotel y Restaurante Esquirol, ubicado en Llívia, se encuentra a las puertas de un relevo generacional clave. Después de más de dos décadas al frente del negocio familiar, Edu Vidal pasará las riendas a su hija, María Vidal, quien tomará oficialmente la dirección en 2026. Con tan solo 22 años, María ha concluido su grado en Dirección Hotelera y una especialización en gestión de restauración en la prestigiosa Escuela Universitaria de Hotelería y Turismo de Sant Pol de Mar.
María ha enriquecido su formación académica con experiencias prácticas internacionales en lugares emblemáticos como el Wilderness Resort en Norteamérica y el Meliá Benidorm. Desde septiembre, ha comenzado su integración en el equipo del Esquirol, con la vista puesta en una transición fluida hacia su nuevo rol.
Su enfoque se centra en preservar el legado familiar que ha convertido al Esquirol en un ícono de hospitalidad en la Cerdanya, mientras introduce una visión renovada que prioriza la cercanía y personalización del servicio. María expresa que el objetivo es que cada cliente se sienta parte de la familia, con detalles como cartas de bienvenida personalizadas en cada habitación.
En cuanto al Restaurante Esquirol, María planea mantener una cocina que aúna tradición y modernidad, siempre con productos locales de calidad. Un ejemplo reciente es la incorporación del jamón ibérico «Juan Manuel Gran Selección 2020», galardonado como el mejor jamón de bellota ibérico en 2024, reflejando su compromiso con la excelencia sin perder la esencia del lugar.
Este relevo generacional en el Grupo Esquirol, que también comprende La Taverna del Call y Planxadito’s en Puigcerdà, busca consolidar su liderazgo en hospitalidad y gastronomía, manteniendo los valores que han guiado a la familia Vidal. Con una combinación de experiencia y juventud, la familia espera reafirmar su posición como referencia en la comarca con un servicio cálido y una experiencia gastronómica auténtica.


