Tras meses de especulación y nueve años al frente de la prestigiosa maison francesa, la reconocida diseñadora ha culminado una etapa marcada por una visión feminista y artística, que ha consolidado a Dior como un emblema de deseo global. Durante su gestión, la casa no solo se destacó por la innovación en la moda, sino también por abanderar causas sociales que resonaron más allá de las pasarelas. La implementación de diseños vanguardistas y el enfoque en la inclusión han sido pilares fundamentales en su estrategia, lo que permitió a Dior mantenerse relevante en un espacio altamente competitivo.
La diseñadora asumió su liderazgo con la intención de reformular la identidad de la maison a través de una lente moderna y consciente, logrando revivir el interés global en la marca. Su compromiso con el empoderamiento femenino se reflejó en colecciones que no solo fueron aclamadas por su estética, sino también por su mensaje. La evolución de Dior bajo su tutela ha dejado una huella indeleble en la industria de la moda, estableciendo un legado que fusiona creatividad con responsabilidad social. La expectación ahora se centra en quién tomará la batuta en esta nueva era para la icónica firma.
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