En una reciente aparición en Fox News, el secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, llamó la atención al lucir una cruz de ceniza en su frente, siguiendo así una antigua tradición cristiana. Esta aparición coincidió con el Miércoles de Ceniza, marcando el inicio de la Cuaresma, un periodo de reflexión y penitencia para los creyentes. Rubio, de origen cubano y ferviente católico, no ha ocultado su fe religiosa al presentarse en público con este símbolo que se obtiene de las cenizas de las hojas de palma del Domingo de Ramos del año anterior. Este gesto evidencia la importancia que Rubio confiere a sus creencias en su papel como figura pública y máximo representante de la diplomacia estadounidense.
Durante la entrevista, Rubio abordó temas de política internacional, destacando su preocupación por el conflicto en Ucrania, al que describió como una ‘guerra indirecta entre Estados Unidos y Rusia’. Reiteró las preocupaciones del presidente Donald Trump sobre la duración y estancamiento del conflicto, enfatizando la urgencia de ponerle fin. En sus declaraciones, el secretario de Estado subrayó la naturaleza tensa y prolongada de esta confrontación, llamando a ambos países a buscar soluciones para evitar un escalamiento que podría tener implicaciones globales dado que involucra a dos potencias nucleares. La intervención de Rubio, marcada por su símbolo de fe y su análisis geopolítico, refleja el complejo cruce entre religión y política en los escenarios internacionales contemporáneos.
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