Este martes, una veintena de familiares de rehenes en manos de Hamás interrumpieron la autopista Ayalon en Tel Aviv con carteles y bengalas, exigiendo al Gobierno israelí un acuerdo de liberación. Con pancartas como «No hay un acuerdo abandonado. Hay abandono», criticaron la falta de acción del primer ministro Benjamín Netanyahu. Los manifestantes también mostraron imágenes de seis rehenes cuyos cuerpos fueron hallados en un túnel en Gaza. Las negociaciones en El Cairo, mediadas por Qatar, EE.UU. y Egipto, han concluido sin avances, mientras la Casa Blanca asegura que se siguen buscando soluciones para un cese de hostilidades. Netanyahu insiste en mantener tropas en puntos estratégicos de Gaza, algo que Hamás rechaza, exigiendo una retirada total y el fin de la guerra. Entretanto, Gaza enfrenta una crisis humanitaria con más de 40,400 palestinos muertos y cerca de 93,500 heridos, en medio de condiciones deplorables en los campamentos de desplazados.
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