Miles de latinos se han volcado a las calles de diversas ciudades en Estados Unidos para protestar contra las políticas de deportación del presidente Donald Trump. En manifestaciones que han tenido lugar en ciudades como Los Ángeles, Nueva York y Chicago, los participantes han expresado su rechazo a las medidas que consideran inhumanas y discriminatorias, que han llevado al incremento de redadas y expulsiones de migrantes en situación irregular. Las protestas, convocadas por organizaciones de derechos humanos y grupos comunitarios latinos, buscan llamar la atención sobre el impacto negativo de estas políticas en las familias y en la cohesión social de las comunidades migrantes en el país.
Los líderes de las manifestaciones han señalado que las políticas de Trump no solo afectan a quienes son deportados, sino también a millones de familias que enfrentan un clima de temor constante debido al riesgo de separación. Además, han emplazado a líderes políticos y a la comunidad internacional a condenar estas prácticas y a buscar soluciones que respeten los derechos humanos. Mientras tanto, las autoridades han reforzado la presencia policial en las calles para controlar el orden durante las protestas, aunque hasta el momento se reportan pocas incidencias violentas. La comunidad latina continúa abogando por un cambio en las políticas migratorias que garantice un trato más justo y humano para los migrantes.
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