La Fundación Madrina ha lanzado una alerta sobre el preocupante aumento de la pobreza en España, que ha crecido un 40% en el último año, afectando ya al 24% de la población. Esta situación es especialmente grave en el ámbito infantil y maternoinfantil, donde la pobreza se está convirtiendo en un problema crónico. Este alarmante panorama representa una emergencia social que requiere una respuesta inmediata y coordinada por parte de las instituciones y la sociedad civil.
Lo más inquietante es que la mitad de las familias en situación de vulnerabilidad tienen al menos un miembro con empleo. A pesar de ello, el aumento desmesurado de los precios, especialmente en alimentos y vivienda, les impide cubrir sus necesidades básicas, viéndose obligadas a tomar decisiones extremas como elegir entre alimentar a sus hijos o mantener un hogar.
Fundación Madrina: 3 Pilares contra la pobreza
Ante este escenario, la Fundación Madrina ha desarrollado proyectos sociales para combatir la pobreza infantil a través de un enfoque integral que abarca tres pilares fundamentales AVF:
- Alimentación: La organización atiende diariamente a 300 familias, proporcionando alimentos básicos para garantizar una nutrición adecuada.
- Vivienda: Madrina ha logrado realojar a cerca de 300 familias y 1000 niños en entornos rurales, ofreciendo una vivienda digna y un entorno más favorable para sobrevivir.
- Formación y empleo: La Fundación ha desarrollado la Universidad de Madres, un programa educativo que empodera a más de 3000 mujeres, proporcionándoles las herramientas necesarias para mejorar su empleabilidad y autonomía económica.
La educación, la clave para romper el ciclo de la pobreza
La Fundación Madrina sostiene que la educación y la formación de las madres son elementos esenciales para erradicar la pobreza a largo plazo. Los datos internacionales respaldan esta afirmación: los países que han invertido más del 7% de su Producto Interior Bruto (PIB) en educación han logrado reducir significativamente la pobreza y generar riqueza a través de la innovación y el desarrollo industrial. Lamentablemente, España se encuentra muy por debajo de este porcentaje, invirtiendo menos del 5% de su PIB en educación.
Propuestas para un cambio estructural
Para abordar esta crisis de manera efectiva, la Fundación Madrina propone las siguientes medidas:
- Aumentar la inversión pública en infancia y maternidad: Es necesario destinar al menos el 7% del PIB a políticas que protejan los derechos de los niños y las madres, garantizando su bienestar y desarrollo.
- Ampliar los permisos de maternidad y lactancia: Otorgar a las madres un mayor tiempo para cuidar de sus hijos es fundamental para fortalecer el vínculo Maternoinfantil y promover la igualdad de género.
- Establecer un salario base maternal universal: Garantizar un ingreso mínimo para todas las madres, independientemente de su situación laboral, permitiría reducir la desigualdad y asegurar un nivel de vida digno.
- Fomentar la lactancia materna: La lactancia materna es un acto de amor y una inversión en la salud de los niños. Es necesario promoverla y facilitarla a través de políticas públicas y apoyo social.
«La pobreza infantil y materno infantil es un problema que nos afecta a todos y requiere una respuesta colectiva», afirma Conrado Giménez, presidente de la Fundación Madrina. «Invertir en las madres y en los niños es la mejor inversión que podemos hacer como sociedad«.
La Fundación Madrina hace un llamamiento a las instituciones, a las empresas y a la sociedad civil para que se unan a esta causa y trabajen juntos por un futuro mejor para todos los niños y niñas de nuestro país.