El Ejecutivo regional ha intensificado sus esfuerzos por acelerar la transición ecológica, al solicitar un aumento de 15 millones de euros al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Esta demanda responde a la avalancha de peticiones generadas por ciudadanos y entidades, y busca garantizar la cobertura de nuevas solicitudes hasta el próximo 31 de diciembre. Con este incremento, se estaría realizando el sexto ajuste de fondos para el Programa MOVES III, que apoya la movilidad sostenible.
El éxito del programa es innegable: hasta la fecha, la adecuada gestión de recursos ha permitido atender a 30,000 demandantes entre los más de 54,500 expedientes concedidos, con una inversión total de 86,5 millones de euros en ayudas distribuidas. Ante la posibilidad de que se genere una nueva lista de espera post-31 de diciembre, el Ejecutivo no descarta volver a solicitar más recursos.
En un esfuerzo paralelo por optimizar el uso de fondos públicos, la Comunidad de Madrid ha solicitado al Gobierno central autorización para redistribuir 20,5 millones de euros desde programas con baja demanda hacia iniciativas de autoconsumo. Esta reasignación de fondos podría traducirse en la financiación de más de 3,800 nuevas instalaciones solares residenciales, una movida que refuerza el compromiso de la región con la autosuficiencia energética y la sostenibilidad.
Madrid se posiciona como líder indiscutible en la ejecución del programa a nivel nacional, con más de 70 millones de euros ya distribuidos a cerca de 20,000 beneficiarios. Este liderazgo no solo resalta la eficiencia administrativa de la región, sino que también pone de manifiesto su firme apuesta por un modelo de desarrollo energético que respeta y protege al medio ambiente.
Además, se ha simplificado el proceso para justificar las inversiones realizadas mediante el establecimiento de un plazo de 12 meses para la presentación de documentación tras la adquisición de vehículos o puntos de recarga. Esta medida busca facilitar la participación de los ciudadanos y acelerar la transición hacia un modelo energético más verde y sostenible.
El compromiso del Ejecutivo regional no cesa aquí. Cualquier indicio de futuras carencias en la financiación para la transición energética provocará nuevas solicitudes de apoyo económico al nivel central, asegurando así la continuidad y expansión de estos esfuerzos vitales para el medio ambiente.