El consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo, ha encabezado una jornada de entrenamiento para binomios guía-perro en el Instituto de Formación Integral en Seguridad y Emergencias regional (IFISE). Durante su visita, Novillo anunció la creación de un circuito de prácticas de 700 metros cuadrados en este mismo espacio, donde se realizarán entrenamientos al menos una vez por semana.
Esta iniciativa destaca por integrar perros provenientes del Centro Integral de Acogida de Animales de la Comunidad de Madrid (CIAAM). Según Novillo, «esto pone en valor la importancia de unir sinergias, proporcionando una nueva oportunidad a estos animales que a su vez ofrecerán un servicio público a todos los madrileños».
Entre los nuevos integrantes del equipo canino, dos perros se especializan en la detección de acelerantes, aportando un apoyo crucial en la investigación de incendios forestales, en el marco del Plan Especial de Protección Civil de Emergencia por Incendios Forestales en la Comunidad de Madrid (INFOMA) 2025. Estos canes son capaces de detectar sustancias en el lugar de origen del fuego, más allá de la capacidad del ojo humano, lo que permite la recogida de muestras para análisis en laboratorio y su utilización en diligencias judiciales.
Además de su labor en incendios, estos perros participarán en la búsqueda de venenos en el campo y en eventos de educación ambiental, acercando las acciones de los agentes forestales al público, especialmente a los más jóvenes. Un ejemplo notable de su eficacia fue la resolución de un caso en Becerril de la Sierra, donde gracias a su intervención se descubrieron cepos con anzuelos, llevando a la identificación del responsable de un delito contra la biodiversidad.
Con el inicio del período de riesgo medio por incendios forestales hasta el 14 de junio, que dará paso a la fase de riesgo alto, la labor de estos binomios se torna vital. En 2024, el Cuerpo de Agentes Forestales investigó el origen de 298 incendios, resultando en 30 procedimientos penales. El análisis reveló que el 39% de los incendios fueron intencionados, con causas como el control de fauna y actividades agrícolas, prevalentes en épocas de bajo riesgo.
La continua investigación y prevención de incendios no solo es esencial para adoptar medidas a futuro, sino que también subraya la importancia del trabajo conjunto entre humanos y animales para la protección del medio ambiente.