La transformación urbanística más ambiciosa de Europa ha dado un paso significativo con la aprobación de la gestión del área de planificación ‘Malmea-San Roque-Tres Olivos’. Esta área, parte del proyecto Madrid Nuevo Norte, abarca más de un millón de metros cuadrados y está diseñada para convertirse en un núcleo de vivienda, empleo y espacios verdes.
El Ayuntamiento de Madrid ha dado luz verde a esta iniciativa urbanística que prevé la construcción de cerca de 7.138 viviendas, de las cuales más de 1.400 estarán protegidas. Este desarrollo también destina amplias áreas a uso terciario: con 214,864 metros cuadrados para oficinas y 36,119 metros cuadrados para comercio.
Este proyecto tendrá un impacto considerable en la calidad de vida de los futuros residentes, quienes disfrutarán de más de 161,000 metros cuadrados de zonas verdes integradas en un parque lineal. Este eje ambiental promoverá la conexión entre los nuevos desarrollos y mejorará el acceso a servicios que ocuparán 136,000 metros cuadrados, incluyendo dotaciones de salud, educación y deporte.
Significativamente, la nueva infraestructura viaria eliminará barreras históricas entre barrios, con tres puentes y un túnel que mejorarán la conectividad del casco de Fuencarral con Las Tablas. Al sur, la conexión con el Centro de Negocios de Chamartín se reforzará con puentes sobre la M-30.
Además, el proyecto pondrá especial énfasis en la movilidad sostenible. Se prevé la creación de carriles bici que conectarán con redes existentes, ofreciendo así más opciones para el ciclismo urbano. El respeto al patrimonio ha sido también una consideración clave, asegurando la preservación de edificios históricos como el Edificio Profidén y la ermita de Nuestra Señora de Lourdes.
Este impulso en la regeneración de Madrid Nuevo Norte responde a la modificación del Plan General de Ordenación Urbana aprobado en 2020. Ya están en marcha tres de las cuatro zonas previstas en el proyecto: ‘Malmea-San Roque-Tres Olivos’, ‘Las Tablas Oeste’ y ‘Estación de Chamartín’. La última en desarrollarse será ‘Centro de Negocios Chamartín’.
En resumen, este proyecto no solo transformará físicamente la zona norte de Madrid, sino que también fortalecerá la cohesión social y económica en la región, sentando las bases para una ciudad más integrada y accesible.