Madrid se prepara para cerrar 2024 con unas cifras históricas en turismo, con la llegada de 11,2 millones de visitantes y un gasto internacional que alcanza los 16.141 millones de euros, lo que supone un incremento del 21% respecto al año anterior. Este notable crecimiento consolida a Madrid como uno de los destinos urbanos más atractivos a nivel mundial, alcanzando la segunda posición según el informe de Euromonitor.
La concejala delegada de Turismo, Almudena Maíllo, ha compartido estos logros durante un desayuno informativo, destacando la implementación de un modelo de turismo de calidad que prioriza el desarrollo sostenible. Entre las cifras reveladas, los visitantes internacionales representaron un crecimiento del 8,8% en comparación con 2023, con Estados Unidos como el principal mercado emisor, seguido de cerca por Italia y Francia. Sin embargo, el mayor crecimiento lo protagonizó China, con un incremento del 78,77% en el número de turistas.
La apuesta de Madrid por los mercados asiáticos ha demostrado ser un movimiento estratégico acertado, dado el alto impacto económico que representan los turistas provenientes de países como China, Japón y Corea del Sur. «El turismo de alto impacto cultural y de ocio que estos mercados aportan es esencial para Madrid», aseguró Maíllo.
Mirando hacia el futuro, Madrid plantea para 2025 un enfoque centrado en la gestión turística eficiente, la innovación tecnológica y el turismo de experiencias. Bajo los cuatro ejes de acción, ‘365 días de Madrid’, ‘Esto también es Madrid’, ‘Madrid [re]imaginado’ y ‘Tú y Madrid’, se abordará la desestacionalización y descentralización, promoviendo destinos poco conocidos dentro de la capital.
El estand madrileño en la Feria Internacional de Turismo (FITUR), que se celebra del 22 al 26 de enero, servirá como plataforma para presentar una visión futurista de la ciudad, llevando a los visitantes a imaginar el Madrid de 2035. Con 1.848 metros cuadrados, el espacio ofrecerá experiencias inmersivas y centrará su narrativa en torno a la Fórmula 1, simbolizando la unión entre tradición y modernidad.
Madrid continúa afianzándose como un destino que no solo busca aumentar el número de turistas, sino hacerlo de manera sostenible y en armonía con su rica identidad cultural, mirando siempre al futuro con optimismo y audacia.