En un anuncio realizado en la sede de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo, se presentó un ambicioso plan conjunto entre el Gobierno madrileño, Farmaindustria y las principales empresas y asociaciones del sector biofarmacéutico. El objetivo principal es reforzar la colaboración público-privada y fomentar el trabajo conjunto entre la industria, universidades y hospitales.
Albert, destacando la iniciativa, enfatizó la apuesta del Ejecutivo autonómico por esta colaboración, con el compromiso de impulsar el sector biofarmacéutico de la región, considerado de primer nivel y con un enorme potencial. Por su parte, Matute calificó la biofarmacéutica como un aliado estratégico clave para enfrentar retos sociosanitarios, como el envejecimiento y la cronicidad, así como para avanzar en precisión y personalización de tratamientos, potenciando así la sostenibilidad del sistema.
La Estrategia incluye 15 proyectos diseñados para mejorar el acceso a la innovación, acelerar la introducción de nuevos medicamentos, fomentar la adherencia terapéutica y promover la formación médica. Además, busca fortalecer el ecosistema de investigación mediante el impulso de la I+D clínica y preclínica, extendiendo ensayos clínicos a la atención primaria y promoviendo la digitalización e inteligencia artificial.
Uno de los puntos centrales es incentivar la inversión industrial, el empleo y la atracción de talento, favoreciendo el desarrollo de nuevas empresas con un foco especial en la cualificación profesional y la internacionalización. Esto tiene como fin mantener Madrid a la vanguardia en competitividad y bienestar, consolidándola como un motor económico y tecnológico en España y Europa.
En términos de inversión, Albert señaló que Madrid ofrece un entorno caracterizado por estabilidad institucional, claridad normativa y baja fiscalidad, convirtiéndola en un destino atractivo para la iniciativa privada. Resaltó que la Comunidad capturó el 67% de la inversión extranjera en el primer trimestre de este año.
Las fundaciones de investigación biomédica del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) y diversos institutos de investigación sanitaria desempeñarán un papel crucial en esta estrategia, gestionando la actividad investigadora en hospitales y centros madrileños.
Madrid alberga actualmente 400 empresas biofarmacéuticas, que generan 24,000 empleos directos y una cifra de negocio de 5,100 millones de euros en 2023. La Comunidad se consolida como líder europeo en ensayos clínicos y una referencia mundial en innovación biofarmacéutica, impulsada por su excelente red sanitaria y profesionales altamente cualificados, atrayendo importantes inversiones del sector.