En un esfuerzo por avanzar hacia un futuro más sostenible, el Ayuntamiento de Madrid ha dado un paso importante al aprobar la concesión de uso de la gasolinera ubicada en la calle Méndez Álvaro, 82, en el distrito de Puente de Vallecas. Esta instalación va a ser transformada en una infraestructura dedicada al suministro de energía para automóviles sin emisiones netas de gases de efecto invernadero, cumpliendo con las metas de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360.
Situada estratégicamente junto a la M-30, la nueva estación ofrecerá una gama de carburantes y energías renovables, abarcando desde líquidos y gaseosos, hasta opciones para pilas de hidrógeno y recarga de baterías de vehículos eléctricos. Esta transformación forma parte de un conjunto de medidas diseñadas para descarbonizar la ciudad, siguiendo la estela de políticas que prohíben el uso de calderas de carbón y restringen la circulación de vehículos altamente contaminantes, acciones que han permitido a Madrid cumplir con las directivas europeas de calidad del aire por tercer año consecutivo.
El Área de Gobierno de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, dirigida por Borja Carabante, tiene como uno de sus objetivos principales la renovación del parque vehicular por carretera. Sin embargo, la evolución del transporte hacia alternativas más limpias debe ir acompañada del desarrollo de infraestructuras adecuadas que faciliten el acceso a estas nuevas fuentes de energía. Para fomentar este cambio, el Ayuntamiento ofrece suelo municipal bajo concesiones demaniales que buscan mitigar el impacto económico de la inversión inicial para los adjudicatarios privados.
La localización de Méndez Álvaro, ya dedicada al suministro de combustibles para automoción y alejada de zonas residenciales, cuenta con un área de más de 6.000 metros cuadrados ideal para implementar las instalaciones necesarias para una oferta diversificada de energías limpias. La convocatoria para el derecho de superficie establece firmemente la exclusión de combustibles fósiles, estipulando que tanto los carburantes como la electricidad suministrada deben ser de origen renovable. Además, se requiere la instalación de puntos de recarga eléctrica avanzados, incluyendo opciones de alta potencia para vehículos eléctricos.
El adjudicatario tendrá la responsabilidad de desmantelar las instalaciones actuales y construir la nueva estación dentro de los 12 meses posteriores a la formalización de la concesión. Asimismo, deberá ejecutar una planta para la producción de electricidad fotovoltaica y mantener la conservación de especies vegetales presentes en la parcela, siguiendo criterios de urbanismo sostenible y accesibilidad universal.
Esta iniciativa no solo impulsa el uso de energías renovables, sino que también incorpora criterios de valoración que premiarán propuestas adicionales, como la expansión de la capacidad de producción fotovoltaica y el incremento de puntos de recarga. El concesionario, además, estará sujeto a un canon que incluye una parte fija mínima y un extra variable basado en el volumen de combustible suministrado.
La transformación de la estación de servicio en Méndez Álvaro 82 representa un significativo avance hacia una movilidad más limpia y respetuosa con el medio ambiente en Madrid, sentando un precedente para futuras iniciativas en la capital y más allá.