El presidente de Francia, Emmanuel Macron, está trabajando intensamente para organizar una reunión urgente de líderes europeos con el propósito de consolidar una postura común y definir una estrategia clara en el proceso de paz en Ucrania. Esta acción se produce tras el anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre el inicio de negociaciones con Rusia para poner fin al conflicto, decisión que aparentemente deja fuera a Europa de las discusiones. La noticia ha generado consternación entre los aliados europeos de Ucrania, quienes ven con urgencia la necesidad de adquirir un papel clave en la arquitectura de seguridad del continente. En este sentido, el ministro de Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, confirmó la convocatoria para un encuentro que, aunque aún carece de formato y lista de participantes oficiales, incluiría a las principales economías de la UE: Alemania, Italia, España y Polonia, además del Reino Unido.
La maniobra de Macron busca reconciliar a Europa en un momento de relaciones tensas con Washington y propiciar una respuesta unificada ante un escenario sin precedentes de negociación entre Estados Unidos y Rusia. Mientras tanto, la administración Trump avanza en acuerdos preliminares con el Kremlin, sugiriendo concesiones territoriales a Rusia y planteando que Europa asuma el costo de la reconstrucción de Ucrania. Dado este contexto, Europa se enfrenta al desafío de establecer una coalición que sirva de garante de paz en Ucrania, con Francia y el Reino Unido a la cabeza, posiblemente respaldados por Alemania y Polonia. Esta iniciativa incluye el despliegue de tropas de paz que solidifiquen la seguridad postbélica de Ucrania. La tensión aumenta mientras el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, rechaza la propuesta de Trump de condicionar la asistencia a la cesión de recursos minerales ucranianos, argumentando que no promueve los intereses de una Ucrania soberana.
Leer noticia completa en El Pais.