En Bruselas, los populares europeos han accedido a las demandas de la delegación española para respaldar a Teresa Ribera en su candidatura como vicepresidenta y comisaria de transición ecológica y competencia, imponiendo dos condiciones claras. La primera exige que Ribera comparezca ante el Congreso de los Diputados para dar explicaciones sobre la gestión del temporal DANA. La segunda condición es que la ministra se comprometa a dimitir en caso de ser imputada. Estas demandas buscan asegurar también el apoyo a otros nominados del ejecutivo de Ursula Von der Leyen, como los comisarios Raffaelle Fitto de Italia y Olivér Varhelyi de Hungría, en un intento por alinear a las principales familias políticas de la Eurocámara en la evaluación conjunta de los seis vicepresidentes.
Las tensiones políticas no se hicieron esperar, con críticas desde diferentes frentes. Vox acusó a Ribera de inacción y exigió su comparecencia ante la Eurocámara. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, demandó una alternativa a su candidatura. No obstante, Ursula Von der Leyen ha mantenido su apoyo a Ribera, mientras que fuentes del partido popular europeo niegan estar planteando otras candidaturas, enfatizando la urgencia de conformar el nuevo ejecutivo comunitario. A pesar de las presiones, el Gobierno español ha descartado retirar la candidatura de Ribera, buscando asegurar que el proceso avance sin contratiempos con la votación programada para el 27 de noviembre, antes del inicio de labores del nuevo ejecutivo el 1 de diciembre.
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