La llegada de la borrasca Floriane a España ha generado alarma entre los expertos meteorológicos, quienes advierten de cambios climatológicos significativos en los próximos días. Después de un periodo de calma caracterizado por la presencia de un anticiclón, el país se enfrenta ahora a un temporal que promete traer condiciones adversas, como lluvias intensas, vientos fuertes y temperaturas más frías, incluso con posibilidad de nieve en cotas bajas. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido alertas ante la inminente llegada de este fenómeno, que marca el inicio del primer gran temporal del invierno.
Las previsiones indican que las precipitaciones persistirán en zonas de montaña y el extremo norte, intensificándose en el noreste de Cataluña y las Islas Baleares. En Canarias, se esperan chubascos aislados, mientras que el resto del país experimentará un aumento en la nubosidad. Un descenso de las temperaturas afectará a gran parte de la península, excepto en la costa mediterránea donde se prevé un ligero aumento. A partir del miércoles, un frente frío asociado a una posible nueva borrasca nominado Garoe intensificará las lluvias en la vertiente atlántica. Esta combinación de factores climáticos señala un cambio drástico y demanda precauciones ante el potencial de condiciones meteorológicas extremas que podrían perturbar gravemente la rutina diaria.
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