En un partido que prometía ser complicado tras la decepcionante experiencia en Pamplona, Robert Lewandowski se convirtió en el héroe indiscutible del Barcelona al marcar un hat-trick en tan solo 30 minutos contra el Alavés, equipo que no había perdido en casa desde marzo. Con esta actuación, el delantero polaco alcanzó un total de 52 goles desde su debut en la Liga, 12 de los cuales han sido en los 11 partidos de esta temporada. La contundencia de Lewandowski facilitó una victoria que inicialmente planteaba interrogantes debido a la reciente caída del equipo catalán en El Sadar. Raphinha, quien ha asumido un papel de liderazgo como capitán, se destacó también al asistir en los dos primeros goles, mostrando una versatilidad que consolida su posición como la estrella del equipo en ausencia de figuras como Dani Olmo.
El técnico Flick, fiel a su estilo alemán directo y agresivo, dispuso una alineación que no dejó margen para sorpresas, dándole descanso a ciertos jugadores pero manteniendo la intensidad que caracteriza a su equipo. A pesar de un cambio temprano obligado por la lesión de Ferran Torres, la estrategia azulgrana no se tambaleó. La defensa del Barça, aunque vulnerable en ciertas zonas debido a las capacidades limitadas del portero suplente Iñaki Peña, se mantuvo firme frente al constante asedio del Alavés. El encuentro se consumió en un ritmo controlado, con el Barça asegurando el liderato de la Liga antes de un crucial parón internacional. Las expectativas están ahora puestas en los próximos desafíos contra potentes rivales como Sevilla, Bayern y Real Madrid, en un momento en el que el retorno de varios jugadores clave podría asegurar aún más el dominio del equipo catalán.
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