La transformación digital ha dejado de ser una simple tendencia para erigirse como un elemento esencial de competitividad y eficiencia en el entorno empresarial. En su más reciente informe, Orbital Vision esboza las tecnologías que protagonizarán esta transición hacia 2025, poniendo especial énfasis en la inteligencia artificial generativa y la gestión de identidades y accesos (IAM) como componentes cruciales para las organizaciones en España.
La inteligencia artificial generativa se presenta como un motor de innovación al permitir la creación de contenido nuevo y altamente personalizado, desempeñando un rol significativo en áreas como marketing, desarrollo de productos y atención al cliente. Esta tecnología emerge no solo como un aliado en la automatización de procesos, sino también como un catalizador de experiencias de usuario únicas, todo ello mientras optimiza recursos y disminuye costos operativos.
Por su parte, la importancia de la gestión de identidades y accesos (IAM) se intensifica en un contexto cada vez más propenso a ciberataques sofisticados. El IAM ofrece un escudo robusto para proteger datos sensibles mediante la implementación de políticas avanzadas que aseguran accesos limitados a usuarios autorizados, reforzando así las barreras de seguridad en las organizaciones.
En línea con la revolución de la Industria 4.0, los gemelos digitales se consolidan como herramientas de vanguardia que permiten la replicación virtual de procesos industriales, facilitando el análisis y la optimización continua de la producción. Esto abre un nuevo horizonte de eficiencia operativa al reducir significativamente los tiempos de inactividad.
La seguridad informática también evoluciona con la inclusión de inteligencia artificial, que permite una ciberseguridad adaptativa y cognitiva. Estos sistemas, capaces de reaccionar en tiempo real ante amenazas, se tornan imprescindibles para el resguardo de datos en una era en que la conectividad y digitalización son omnipresentes.
En el ámbito de la infraestructura tecnológica, la modernización de aplicaciones hacia la nube se convierte en un paso crucial. Esta transición no solo reduce costos, sino que dota a las empresas de una agilidad y escalabilidad sin precedentes, favoreciendo la rápida adaptación a dinámicas de mercado cambiantes.
El futuro de la conectividad empresarial será liderado por el Wi-Fi 7, que promete velocidades de hasta 46 Gbps, revolucionando así entornos que demandan alta conectividad como centros de datos y oficinas híbridas. Por último, la nube híbrida se establece como la opción predilecta para las organizaciones que buscan combinar la escalabilidad de la nube pública con el control que brinda un entorno privado, garantizando así el cumplimiento de estrictos estándares de seguridad y privacidad.
De esta manera, la proyección hacia 2025 revela que las empresas que adopten estas tecnologías no solo asegurarán su competitividad, sino que también abrirán la puerta a nuevas oportunidades de negocio. Al fin y al cabo, la transformación digital ofrece un camino hacia la resiliencia y sostenibilidad en un mundo cada vez más interconectado y digitalizado. orb