En un esfuerzo por fortalecer los lazos culturales y promover la diversidad en la comunidad, el Ayuntamiento de Las Rozas celebró ayer una vibrante gala en el Auditorio Joaquín Rodrigo con motivo del Año Nuevo Chino. El evento contó con la presencia de destacadas figuras, incluyendo al alcalde de Las Rozas, José de la Uz, el embajador de la República Popular China en España, Yao Jing, y la presidenta de la Asociación de Arte de Huaxing de Madrid, Wang Jian Feng. También asistieron miembros clave del gobierno local, como Gloria Fernández, concejal de Educación y Cultura, y David Santos, concejal de Seguridad y Emergencias.
La gala, concebida como un escaparate de la rica cultura china, presentó una serie de actuaciones artísticas que cautivaron al público. Entre ellas, la Danza grupal «Río Erguna» deleitó a los asistentes con su perfecta sincronización y colorido vestuario. Las interpretaciones musicales, tanto de piano como de violín, aportaron un toque de serenidad que contrastó con el dinamismo del baile urbano y la danza clásica.
Uno de los momentos más destacados de la noche fue la impresionante fusión cultural lograda con la coreografía de flamenco y castañuelas, presentada por la Escuela Municipal de Danza. Esta actuación no solo celebró el arte y la tradición española, sino que también simbolizó el encuentro armonioso entre culturas.
El evento cerró con la emotiva actuación del coro femenino «Cantemos con los tambores», que recibió una cálida ovación del público. Las palabras del alcalde de Las Rozas, José de la Uz, resonaron en la sala al destacar las similitudes entre el espíritu emprendedor de la comunidad china y el propio de la ciudad. “El afán de superación y las ganas de trabajar que caracterizan a la comunidad china encajan con el espíritu de Las Rozas, una ciudad acogedora, donde apreciamos especialmente a los empresarios, y donde fomentamos el emprendimiento, el talento y la innovación como herramientas para que todos vivamos mejor, al igual que hacen en China”, afirmó de la Uz.
La gala del Año Nuevo Chino en Las Rozas no solo sirvió como un puente cultural entre España y China, sino que también reafirmó el compromiso del municipio con la diversidad y el intercambio cultural, promoviendo un entorno de convivencia enriquecedor para todos sus residentes.
