En un fallo histórico, el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) ha avalado la intervención de los mercados energéticos mediante un tope a los precios del gas, una medida que en su momento fue defendida por Pedro Sánchez y António Costa para aliviar la factura de electricidad en la Península Ibérica. Esta medida, conocida como la «excepción ibérica», fue adoptada en medio de la crisis energética exacerbada por la guerra en Ucrania y tenía como objetivo bajar drásticamente el costo de la luz. Si bien inicialmente encontró resistencia entre los líderes europeos, la medida ganó adeptos y ahora cuenta con el respaldo contundente del Tribunal, que deja abierta la posibilidad de usar intervenciones similares en el futuro frente a «graves perturbaciones» en los mercados.
La sentencia desestima las impugnaciones de varias empresas que argumentaban que la medida era inapropiada y discriminatoria. El TGUE rechazó todos sus argumentos, afirmando que las empresas no lograron demostrar que existieran dificultades serias que justificaran una investigación formal sobre la compatibilidad de la excepción ibérica con las normas del mercado interno. En España, la aprobación del Tribunal ha sido celebrada por figuras políticas como Sara Aagesen, ministra para la Transición Ecológica, destacando el ahorro de más de 5,100 millones de euros para los consumidores españoles. Esta decisión también refuerza el modelo regulatorio de la Península y respalda el nuevo Pacto para la industria limpia.
Leer noticia completa en El Pais.