En el marco de la acelerada digitalización impulsada por la pandemia, el último informe sobre Tecnología y Discapacidad revela que el 85% de las empresas han iniciado procesos de transformación digital. A medida que se aproxima el 15 de julio, Día Internacional de las Tecnologías Apropiadas, la Fundación Adecco, en colaboración con Keysight Technologies Spain, presenta la decimotercera edición de este informe, destacando cómo las nuevas tecnologías se convierten en grandes aliadas para la inclusión social y laboral de las personas con discapacidad en una sociedad cada vez más digitalizada.
El informe analiza los avances tecnológicos desde diversas dimensiones: ética, cultural, social, económica y medioambiental. El binomio tecnología y discapacidad es crucial, considerando a estas personas como un grupo estratégico para el desarrollo de tecnologías inclusivas, en línea con los objetivos de la Agenda 2030.
Tradicionalmente, este informe recoge las voces de las personas con discapacidad para evaluar el impacto de las tecnologías en sus vidas sociales y laborales, revelando constantemente una percepción positiva. En esta edición, se han escuchado también a las empresas, importantes generadores de empleo, para comprender mejor cómo la transformación digital influye en sus objetivos de Diversidad, Equidad e Inclusión (DE&I) y, en particular, en la incorporación de personas con discapacidad.
A pesar de los avances recientes, la presencia de personas con discapacidad en el tejido empresarial sigue siendo insuficiente. Entre enero y abril de 2024, se han firmado 32.605 contratos para personas con discapacidad, pero el 71% de estos están en el ámbito protegido (Centros Especiales de Empleo), mientras que solo el 29% se celebraron en empresas ordinarias.
Las empresas muestran una creciente voluntad de incorporar personas con discapacidad, aunque enfrentan obstáculos significativos como problemas de reclutamiento, barreras culturales y la falta de accesibilidad física, sensorial y cognitiva. A pesar de esto, el 85% de las empresas ha experimentado una digitalización desde la pandemia y un 72% cree que estos cambios favorecerán la inclusión laboral de personas con discapacidad.
Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco, señala: «La inversión tecnológica puede ser una aliada fundamental para derribar obstáculos que dificultan el empleo de las personas con discapacidad; sin embargo, es imprescindible que vaya acompañada de un cambio cultural y organizativo más profundo.»
En el contexto de esta transformación digital, un 40,7% de las empresas ha implementado medidas específicas para facilitar la inclusión de personas con discapacidad: el 85% ha adoptado tecnologías accesibles para personas con discapacidad visual y/o auditiva, el 32,5% ha realizado adaptaciones para discapacidades físicas y el 13% ha invertido en herramientas para discapacidades intelectuales.
«La estandarización y el mayor recorrido de las adaptaciones tecnológicas de tipo visual o auditivo permite una implementación más directa, mientras que su desarrollo es más complejo para discapacidades intelectuales o cognitivas, que requieren enfoques más personalizados,» explica Mesonero.
La tecnología puede eliminar barreras históricas que han dificultado el empleo de las personas con discapacidad, contribuyendo significativamente a:
1. Mayor accesibilidad de las herramientas de trabajo.
2. Diseño universal e inclusivo.
3. Trabajo remoto.
4. Softwares de automatización.
5. Sistemas de Inteligencia Artificial.
6. Impulso a la sensibilización.
7. Mejora de la salud y la seguridad.
Formación en nuevas tecnologías se perfila como una solución crucial para impulsar la contratación de personas con discapacidad en empresas ordinarias, considerando que un 75,6% de las empresas manifiestan dificultades para reclutar talento con discapacidad y un 88,6% considera la capacitación tecnológica como un puente hacia las vacantes.
«La tecnología y la IA pueden ser un motor de inclusión laboral desde una doble vía: como grandes igualadoras y potenciando la capacitación en áreas tecnológicas de alta empleabilidad,» destaca Mesonero.
Es fundamental desarrollar un marco inclusivo para la IA en los procesos de selección, ya que un 75% de las empresas aún no han implementado estas medidas. «Es esencial buscar mecanismos para integrar la inclusión en los sistemas de Inteligencia Artificial,» explica Mesonero. «La tecnología debe promover la diversidad y no actuar en detrimento de la inclusión.»
