La Oficina de la Protectora del Inversor de BME ha presentado su Informe Anual 2024, en el cual se destaca un notable incremento del interés y la participación de los inversores en el mercado. Durante el último año, la entidad gestionó un total de 2.110 consultas, lo que representa un aumento del 6% en comparación con el año anterior. Esta cifra refleja el creciente interés de los inversores en entender mejor el mercado bursátil, especialmente a través de canales tradicionales como el teléfono, que sigue siendo el medio de comunicación preferido, seguido por el correo electrónico.
El informe revela que el 95% de las consultas provienen de inversores particulares, aunque también se observó un incremento en las consultas de emisoras, miembros del mercado y entidades financieras. Este auge coincide con un aumento en las Ofertas Públicas de Adquisición (OPAs) durante 2024, que han despertado un gran interés entre los inversores. OPAs significativas, como la de BBVA sobre Banco Sabadell y la de Brookfield sobre Grifols, han generado incertidumbres. Los accionistas buscan claridad sobre las implicaciones y derechos que conllevan estas operaciones.
Además, el informe resalta un notable interés por obtener precios históricos de valores cotizados, una demanda que proviene tanto de particulares como de entidades con fines fiscales. Las consultas sobre la baja voluntaria de la inscripción de acciones y cómo evitar costos de mantenimiento por valores excluidos o suspendidos, como es el caso de la Seda de Barcelona, en proceso de liquidación, también fueron prominentes.
La Oficina alertó sobre casos de fraude y suplantación de identidad, en los que falsos asesores financieros contactaron a inversores haciéndose pasar por BME. Se enfatizó que BME no presta servicios de inversión ni realiza llamadas comerciales, instando a los inversores a verificar la autenticidad de las comunicaciones.
Para promover la transparencia del mercado y proteger a los inversores, la Oficina emitió varias recomendaciones. Estas incluyen precauciones contra fraudes, clarificación de información durante las OPAs, y la simplificación de los procesos para renunciar a valores excluidos. También se hizo hincapié en que los intermediarios deben proporcionar información más clara en la ejecución de órdenes bursátiles.
Gloria Martínez-Picazo, Protectora del Inversor de BME, subrayó que la Oficina está comprometida en ofrecer un canal seguro y eficiente donde los interesados en el mercado bursátil pueden obtener la información necesaria para resolver sus dudas, promoviendo así una mayor confianza en sus transacciones. Con estas iniciativas, la Oficina refuerza su papel crucial en la defensa y educación de los inversores, adaptándose a los desafíos de un entorno financiero en constante cambio.