El artículo critica a la «mentalidad tribal» del progresismo español, acusándola de apropiarse de figuras históricas y de la solidaridad como monopolio exclusivo de su ideología, mientras repudian los símbolos nacionales como la bandera española. Se señala que esta élite progresista, que pregona igualdad y solidaridad, vive de forma hipócrita, disfrutando de privilegios económicos y educativos que niegan al resto. Además, acusa a estos progresistas de odiar a España en su totalidad y de imponer su visión mediante propaganda y censura informativa, convirtiéndose en la antítesis de lo que defienden públicamente.
Leer noticia completa en OK Diario.