El Ministerio de Seguridad Social, liderado por Elma Sainz, ha presentado una nueva regulación para la reincorporación progresiva al trabajo tras largas bajas por enfermedad. Esta propuesta, que fue inicialmente polémica, plantea que los empleados se reintegren de manera paulatina solo después de recibir el alta médica, aplicándose únicamente a bajas de más de 180 días. Este mecanismo permitirá a los trabajadores desempeñar la mitad de su jornada laboral habitual, percibiendo un salario proporcional y una prestación equivalente al 50% de la incapacidad temporal por el tiempo no trabajado.
En un contexto de incrementos en las bajas laborales y muertes en el trabajo, la normativa también introduce modificaciones en la gestión de incapacidades temporales y permanentes. Las mutuas podrán proponer el alta de trabajadores en procesos de baja superiores a un año, un cambio que antes gestionaba solo el Instituto Nacional de la Seguridad Social. Además, se incorporan disposiciones para trabajadores pluriempleados, permitiendo realizar una de sus actividades mientras están de baja en otra. En paralelo, se discuten medidas para reducir el absentismo laboral, incluyendo la reducción de la jornada laboral máxima, lo que se considera un paso hacia mejorar la productividad empresarial.
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