La Fiscalía estudia la relevancia jurídico penal de mensajes difundidos en redes que criminalizan a extranjeros con falsedades, principalmente dirigidos contra menores sin referentes familiares en España, tras el asesinato de un niño en Mocejón. La delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, condenó a los propagadores de odio, que vinculaban el crimen a la inmigración, mientras que el portavoz de la familia del niño pidió no criminalizar a nadie por su origen. Tolón sugirió posibles acciones contra los agitadores, calificando de cruel la difusión de desinformación.
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