La fiscal jefa provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, ha negado cualquier implicación en la filtración de correos electrónicos relacionados con Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, durante su comparecencia ante el juez del Supremo Ángel Hurtado. Rodríguez, quien es una de las tres personas investigadas por el caso, afirmó que actuó bajo las órdenes del fiscal general Álvaro García Ortiz, quien le solicitó recabar dichos correos para aclarar una información errónea publicada por un medio. La fiscal sostuvo que hasta 60 personas tuvieron acceso a los correos, sugiriendo que la revelación pudo haber provenido de otros lados. Rodríguez subrayó que su actuación no implicó ningún trato de favor o desfavor hacia González Amador.
El juez Hurtado está indagando si Rodríguez, García Ortiz y el fiscal Diego Villafañe son responsables de las filtraciones relacionadas con el caso tributario de González Amador. Las filtraciones iniciales, distribuidas por diversos medios, expusieron un acuerdo que supuestamente buscaba evitar penas para González Amador, aunque más tarde se confirmó que el abogado de este había propuesto el acuerdo. La información recabada del teléfono móvil de Rodríguez mostró que la fiscalía trató de rectificar las informaciones mediante una nota de prensa, la cual fue presuntamente divulgada antes de tiempo. Al momento de las filtraciones, ya se sospechaba que la información provenía de la fiscalía, dado que la denuncia no estaba aún en conocimiento de la defensa del implicado. Rodríguez insistió en que su papel se limitó a seguir instrucciones, sin pretender la difusión de los correos.
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