El presidente del Gobierno ha dado instrucciones a José Luis Ábalos para lanzar una ofensiva política contra el Partido Popular (PP) después de que el diario EL MUNDO destapara los contactos ocultos entre miembros del PP y el extesorero Luis Bárcenas. La investigación periodística reveló que estos contactos tenían como objetivo brindar apoyo a Bárcenas en sus procesos judiciales, generando un nuevo escándalo que ha sacudido el panorama político español. Las revelaciones han intensificado la tensión entre los principales partidos, en un contexto ya cargado por la proximidad de las elecciones generales.
Desde el Ejecutivo, se busca capitalizar el momento para debilitar la imagen del PP, con Ábalos al frente de la estrategia. El dirigente socialista ha comenzado a articular un discurso que acusa al PP de falta de transparencia y de recurrir a prácticas opacas, perjudicando la confianza pública. La respuesta del Gobierno se enmarca en una ofensiva más amplia que busca alinearse con una política de regeneración y transparencia, intentando así reforzar su posición frente a un electorado cada vez más escéptico ante las noticias de corrupción. Mientras tanto, el PP se enfrenta al desafío de manejar el impacto de estas revelaciones en su imagen pública y electoral.
Leer noticia completa en El Mundo.