En una jornada electoral decisiva en Francia, la coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP) ha logrado frenar el avance de la ultraderecha liderada por Marine Le Pen y Jordan Bardella, consiguiendo entre 177 y 192 escaños en la Asamblea Nacional frente a los 138-145 de Agrupación Nacional (RN). Emmanuel Macron, cuyos liberales de Ensemble han obtenido entre 152 y 158 diputados, deberá ahora pactar un nuevo primer ministro con la izquierda. La inesperada dimisión del primer ministro Gabriel Attal añade presión sobre Macron, quien aún no ha decidido si la aceptará. Las elecciones, convocadas tras el descalabro de los liberales en los recientes comicios europeos, dejan a Francia ante el reto de formar un gobierno en un parlamento extremadamente polarizado. Le Pen, a pesar de los resultados, ha vaticinado que el ascenso de su partido no ha terminado.
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