Los dirigentes de la CUP, Pilar Castillejo y Adrià Plazas, se encuentran en Israel tras negarse a firmar su deportación. Ambos políticos catalanes fueron detenidos en el aeropuerto de Tel Aviv después de que las autoridades israelíes les cuestionaran sobre el motivo de su visita al país. La negativa a firmar sus papeles de deportación ha llevado a una situación de tensión que aún no se resuelve, mientras permanecen en territorio israelí. La CUP sostiene que el viaje tenía un propósito de observación política, vinculado a la situación en Palestina.
Según fuentes cercanas, el gobierno español está al tanto de la situación y ha iniciado conversaciones diplomáticas para buscar una solución. La detención de los dirigentes ha generado controversia, y desde diversos sectores políticos exigen una respuesta firme por parte de las autoridades españolas. Organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por el trato recibido por los representantes de la CUP, mientras que sus partidarios en Cataluña se han movilizado en protesta, exigiendo su liberación y retorno seguro.
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